La Xenofobia una actitud histórica
Guillermo García Machado
La situación muy definida de ciertos grupúsculos políticos en
la gran América que se niegan históricamente a conceder o reconocer el esfuerzo
de la migración hispana y cualquiera otra que haya contribuido al desarrollo
pleno del país receptor, sean ellos del Tea Party, sean republicanos o uno que
otro político disfrazado de demócrata, nos obligan a poner bajo su atención el
verdadero significado de la Xenofobia. El término xenofobia proviene del concepto griego compuesto por xénos (“extranjero”) y phóbos (“miedo”). La xenofobia, por
lo tanto, hace referencia al odio, recelo, hostilidad y rechazo hacia los extranjeros. La palabra también
suele utilizarse en forma extendida con la fobia hacia los grupos étnicos
diferentes o hacia a las personas cuya fisonomía social, cultural y política se
desconoce. La xenofobia es una ideología que consiste en el
rechazo de las identidades culturales que son diferentes a la propia. A diferencia del racismo, la xenofobia se
plantea aceptar a los extranjeros e inmigrantes, siempre que se cumpla su
asimilación sociocultural. Puede decirse que este tipo de discriminación se
basa en distintos prejuicios históricos, religiosos, culturales y nacionales, que llevan al xenófobo a justificar la segregación entre
distintos grupos étnicos con el fin de no perder la identidad propia. Por otra
parte, muchas veces se
suma un prejuicio económico que considera a los inmigrantes como una competencia
por los recursos disponibles en una nación.
Por tal motivo, la crisis económica y social que sufrieron muchos países a
finales del siglo XX fue el punto de partida para una manifestación agresiva de
la xenofobia, que se vio reflejada desde las pancartas y los discursos hasta
los actos de violencia de todo
tipo. Los medios de comunicación, por su parte, suelen colaborar con el
desarrollo de la xenofobia al presentar las costumbres y culturas extranjeras
como dimensiones extrañas y ajenas a la identidad nacional.
Como destacara Carlos Mendoza para Prensa Libre de Guatemala: “Cabe
destacar que los antropólogos han
advertido situaciones de xenofobia en los pueblos arcaicos, lo que demuestra
que la xenofobia es un fenómeno que ha estado siempre en las conductas humanas.
Algunos piensan que las actitudes y los comportamientos xenófobos de un
buen porcentaje de la población estadounidense y de sus gobernantes es algo
reciente y específicamente dirigido contra la ola de migración latinoamericana.
Eso es incorrecto. La xenofobia en los Estados Unidos es una enfermedad social
crónica que se ha traducido en muy diversas instituciones formales para evitar
la llegada de inmigrantes de distintas nacionalidades y etnias. Los ejemplos
abundan. Entre 1850 y 1880, aproximadamente 100 mil chinos llegaron a
California para trabajar en las minas de oro y en la línea férrea
transcontinental. Incluso, había un tratado entre China y los EEUU que permitía
la libre movilidad de personas entre ambos países. Los chinos podían optar a
ser residentes permanentes, pero no ciudadanos. A principios de la década de
1880, las pobres condiciones económicas de los países de Europa del Este y del
Sur obligaron a muchos de sus habitantes a migrar hacia los EEUU. En los
primeros diez años del siglo veinte llegaron al país millones de italianos,
rusos, polacos y griegos, entre otros. Ciertamente, había pocas limitaciones
para su entrada, hasta la década de 1920, cuando el Congreso la limita a sólo
100 mil personas por año. En 1847 ya había en los EEUU unos 50 mil judíos
procedentes de Alemania, debido a las malas condiciones económicas en aquel
país. En la década de 1930, muchos llegan escapando de la persecución
étnico-religiosa de la Alemania Nazi. Sin embargo, la pobreza y la
discriminación también les afectaron en tierras estadounidenses. Eran vistos
como una amenaza en el mercado laboral, especialmente en épocas de crisis
económica. Incluso los judíos ricos fueron víctimas del anti-semitismo. Se les
acusaba y perseguía por “comunistas”. Con las leyes anti-inmigrantes de los
años 20's, el número de inmigrantes judíos se redujo de 120 mil a 24 mil en tan
sólo tres años (1920-22). En 1850, 750 mil irlandeses llegaban a los EEUU, en
1890 eran 900 mil. Eran refugiados de la hambruna que buscaban sobrevivir.
Desde antes, sin embargo, los irlandeses católicos ya eran víctimas de la
discriminación religiosa en los EEUU. En 1829, un convento de monjas y dos templos
católicos fueron quemados. Los protestantes les discriminaban por católicos y
por pobres, pues se creían superiores. Los políticos “nativistas” decían que la
inmigración irlandesa iba arruinar la “pureza” de la población y que la lealtad
al Papa de Roma era un peligro para la nación. Por ello, eran tratados como
ciudadanos de segunda clase. Estos prejuicios de muchos ciudadanos y políticos
estadounidenses explican las leyes anti-inmigración aprobadas en la década de
1920. Ciertamente, entre 1900-20 ingresaron a los EEUU cerca de 14 millones de
extranjeros, en su mayoría europeos. ¿Es eso una muestra de que la sociedad
estadounidense estaba abierta a la inmigración? ¿Acaso los 3.8 millones de
mexicanos que han cruzado la frontera en las décadas de 1980 y 1990 dan
testimonio de la apertura que “siempre” ha mostrado EEUU hacia los inmigrantes?
Pienso que la dirección de causalidad es al revés. Los grandes números de
inmigrantes generan, o reavivan, los sentimientos xenófobos de un gran número
de ciudadanos y políticos estadounidenses. Así, después de una gran ola de
inmigración, acontece una gran ola de políticas y leyes anti-inmigratorias. Lo
que vemos hoy contra los inmigrantes latinoamericanos es muy similar a lo que
ocurrió en la década de 1920 contra los inmigrantes europeos, o contra los
chinos después de 1880. La depresión económica de entonces hizo que las
actitudes y comportamientos xenófobos se exacerbaran. Ahora, con esta nueva
crisis económica, no es de extrañar que la xenofobia se traduzca en más redadas
y leyes locales y federales contra los que buscan aprovechar las oportunidades
que no existen en sus países”.
No comments:
Post a Comment