Sunday, April 26, 2020


ESTADO

Guillermo García Machado

Debemos decir que Estado es una figura con valor a nivel político que sirve para presentar una modalidad de organización de tipo soberana y coercitiva con alcance social. De esta forma, el Estado aglutina a todas las instituciones que poseen la autoridad y la potestad para regular y controlar el funcionamiento de la comunidad dentro una superficie concreta a través de leyes que dictan dichas instituciones y responden a una determinada ideología política.
Es importante aclarar que los conceptos de Estado y gobierno no se consideran sinónimos. Los gobernantes son aquellos que, por un tiempo determinado, desempeñan funciones en las instituciones que forman parte del Estado. Además, hay que diferenciar el término Estado de la idea de nación, ya que existen naciones sin Estado y Estados que aglutinan a distintas naciones.
Antes, cuando el Estado todavía no había sido constituido como concepto, el ser humano intentaba marcar sus límites por la fuerza, así se realizaron las grandes conquistas a fin de ampliar los límites del territorio. Actualmente, existen medios más pacíficos y democráticos para establecer los límites, aunque a decir verdad, todavía continúa utilizándose la fuerza para delimitarlos. Por otra parte, hay que decir que Estado es una noción con valor a nivel político que sirve para presentar una modalidad de organización de tipo soberana y coercitiva con alcance social. De esta forma, el Estado aglutina a todas las instituciones que poseen la autoridad y la potestad para regular y controlar el funcionamiento de la comunidad dentro una superficie concreta a través de leyes que dictan dichas instituciones y responden a una determinada ideología política. Es importante aclarar que los conceptos de Estado y gobierno no se consideran sinónimos. Los gobernantes son aquellos que, por un tiempo determinado, desempeñan funciones en las instituciones que forman parte del Estado. Además, hay que diferenciar el término Estado de la idea de nación, ya que existen naciones sin Estado y Estados que aglutinan a distintas naciones.  Para que un Estado pueda ser considerado como tal debe contar con ciertos elementos, estos son: territorio delimitado, población, leyes, organismos de gobierno, soberanía interna (poder para aplicar las propias leyes dentro del territorio sin necesidad de que interfieran otros estados) y soberanía externa (convocar a sus pobladores cuando existiera un ataque exterior a fin de defender su territorio). En palabras del alemán Max Weber, el Estado puede ser definido como una organización respaldada por el denominado monopolio de la violencia legítima. Por eso está integrada por organismos poderosos como lo son las fuerzas armadas, la policía y los tribunales, ya que él se encarga, entre otras cosas, de garantizar las funciones y obligaciones de gobierno, defensa, seguridad y justicia en un espacio específico. Hablar de Estado de derecho, asimismo, es describir a un sistema en el cual su organización gira en torno a la división de los poderes (es decir, el Legislativo, el Ejecutivo y el Judicial). De todos modos, es necesario también aclarar que varias corrientes filosóficas se oponen a la existencia del Estado tal como lo conocemos. El anarquismo, por ejemplo, promueve la desaparición absoluta de los Estados y su sustitución por entidades libres y organizaciones de espíritu participativo. El marxismo, en cambio, considera que el Estado es un recurso controlado por una clase dominante que sirve para ejercer dominio. Por lo tanto, aboga por su aniquilación para lograr su reemplazo por un Estado obrero como parte de la transición hasta llegar al socialismo y el comunismo, donde al haberse logrado erradicar la lucha de clases, ya no se necesitará un Estado.

Sunday, April 19, 2020


SOLIDARIDAD

Guillermo García Machado
Antes de definir el término es necesario establecer su origen. Este concepto proviene del término del latín soliditas que hacía referencia a una realidad homogénea, entera y unida donde los elementos que conformaban ese todo eran de igual naturaleza.
De este modo, el concepto de solidaridad describe la adhesión de modo circunstancial a una causa o a proyectos de terceros. El término se utiliza en forma habitual para denominar una acción de perfil dadivoso o bienintencionado. De todas maneras, su raíz etimológica hace referencia a un comportamiento in-solidum, es decir, que se enlazan los destinos de dos o más personas. Por lo tanto, ser una persona solidaria no se limita al ofrecimiento de ayuda, sino que implica un compromiso con aquel al que se intenta ayudar.
El sentido más básico de la solidaridad supone que se desarrolla sin distinción, límites o condicionamientos de sexo, raza, nacionalidad, religión ni de afiliación política. La única finalidad de la solidaridad puede apuntar al ser humano en estado de necesidad. De todas formas, el uso del término ha quedado desvirtuado ante el abuso del discurso político y el denominado marketing solidario.
La verdadera solidaridad es ayudar a alguien sin recibir nada a cambio y sin que nadie se entere. Ser solidario es, en su esencia, ser desinteresado. La solidaridad se mueve sólo por la convicción de justicia e igualdad.
Fue la teología cristiana quien lo adoptó por primera vez al referirse a la sociedad de todos los seres humanos, iguales entre sí por ser hijos de Dios y unidos en los vínculos de una sociedad. La primera comunidad cristiana se basaba en este concepto y en ella la fraternidad era fundamental, impulsándolos a buscar el bien de todos los que formaban parte del grupo.
Desde el punto de vista filosófico de la concepción cristiana de una sociedad, la solidaridad es la forma en la que debe organizarse política y socialmente un grupo, donde el fin principal es el bienestar de todos y cada uno de los individuos que lo conforman. La solidaridad es el elemento fundamental para conseguir un desarrollo de la doctrina social sana, y debe ocupar siempre un espacio especial. El bien común, la autoridad y la subsidiaridad son además los fundamentos de toda filosofía social, sin ellos una sociedad no podría jamás encaminarse a un fin de provecho colectivo. Por su parte, la ciencia del Derecho utiliza este término para referirse a un individuo enmarcado en un grupo jurídicamente homogéneo, con bienes y derechos unívocos. En este caso la solidaridad incluye una alta responsabilidad de cada individuo con respecto al todo. El Derecho considera que la solidaridad también es fundamental para que una sociedad pueda progresar, pues es el modo en el que derechos y obligaciones se equilibran y se encuentra la armonía.  Hoy en día, a su vez, el término ha cobrado una dimensión social globalista. La posibilidad de comprender lo que ocurre en todos los rincones del planeta y las relaciones entre los diferentes países, ha llevado a crear una consciencia social colectiva donde las personas solidarias son aquellas que luchan contra las injusticias sociales en cualquier aspecto (la pobreza, el hambre, la discriminación sexual, etc) en procura de un mundo más unido y pacífico.

Sunday, April 12, 2020


Guillermo García Machado
El vocablo griego éndēmos, que puede traducirse como “del territorio propio”, llegó al francés como endémie. De allí procede la idea de endemia, que se emplea en nuestra lengua para aludir a una enfermedad que es habitual en una determinada región. La endemia, por lo tanto, es un proceso de tipo patológico que subsiste de manera estacionaria en una cierta zona durante un periodo extenso. Una enfermedad convertida en una endemia supone que, en el territorio en cuestión, existe un número elevado de individuos afectados a lo largo de los años, más allá de eventuales fluctuaciones. Las enfermedades endémicas suelen ser infecciosas. Una de las más comunes es la fiebre amarilla, también conocida como vómito negro o plaga americana. La causa un virus que transmiten los mosquitos pertenecientes a los géneros Haemagogus y Aedes. Los síntomas y su gravedad son bastante variables, ya que van desde una fiebre leve hasta la presencia de hemorragias y afecciones al hígado que pueden conducir a la muerte en un 50% de los casos.
La fiebre amarilla, por ejemplo, es una endemia en varios países de clima tropical: esto quiere decir que existe riesgo de contagio cuando alguien permanece en dichas naciones. Por eso antes de viajar a sitios donde la fiebre amarilla es endemia, se suele recomendar vacunarse contra dicha enfermedad, aunque la indicación debe ser realizada por un médico según las condiciones individuales de cada persona. Incluso hay países que exigen la vacuna como requisito para permitir el ingreso. Cabe aclarar que también existen las enfermedades endémicas no infeccionas, dado que en esta categoría tan amplia entran muchas condiciones fisiológicas. La enfermedad de Chagas también es endémica. La causa el protozoo flagelado Trypanosoma cruzi y afecta a diversos vertebrados antes de llegar al ser humano. Esta enfermedad se encuentra en muchos países del continente americano, desde el sur de Norte América hasta la región patagónica argentina y la contraen decenas de millones de personas todos los años. La endemia no solamente se mantiene a lo largo del tiempo en una zona geográfica o población definidas, sino que puede persistir incluso a través de las diferentes estaciones del año, algo que no ocurre con ciertas enfermedades comunes. De acuerdo con la intensidad de la transmisión, es posible clasificar las enfermedades endémicas de la siguiente manera: * hipoendémicas: son aquellas cuyo grado de transmisión es muy bajo, y cuyos efectos no son realmente considerables; * mesoendémicas: estas enfermedades se establecen en poblaciones pequeñas. Su intensidad depende en gran parte de las condiciones de la comunidad, por lo cual se debe analizar en cada caso en particular; * hiperendémicas: la transmisión de estas enfermedades endémicas es persistente aunque dura poco tiempo. Sus efectos no pueden ser combatidos por medio de la inmunidad de la población; * holoendémica: se trata del grupo con un mayor grado de transmisión, así como una zona de distribución muy amplia que se deben en general a que la población adulta no posee la inmunidad necesaria para hacerle frente.
Según la cantidad de afectados, la endemia puede convertirse en una epidemia o en una pandemia. La epidemia implica el contagio simultáneo, durante un cierto tiempo, de un número elevado de personas en una misma zona Si la epidemia se propaga a varios países o afecta a casi todas los individuos de un lugar, se habla de pandemia.
Es importante mencionar que las endemias constituyen un problema de salud pública. El Estado debe garantizar las medidas de prevención y los tratamientos para cuidar a los ciudadanos. El marco en el cual se ubica este concepto es la epidemiología, una disciplina de la ciencia que se encarga del estudio de la frecuencia, la distribución, el control, las predicciones y los factores determinantes que están ligados a las enfermedades y la salud en determinadas poblaciones humanas.


Sunday, April 5, 2020


VIRUS

Guillermo García Machado
Con el apoyo que merece el tema, desde la propia visión científica, y con la anuencia de la literatura especializada: Virus es una palabra de origen latino, cuyo significado es veneno o toxina. Se trata de una entidad biológica que cuenta con la capacidad de multiplicarse al utilizar la maquinaria celular.
“Un virus está formado por una cápside de proteínas que envuelve al ácido nucleico (ADN o ARN). Esta estructura, por su parte, puede estar rodeada por la envoltura vírica (una capa lipídica con diferentes proteínas).
En concreto podemos establecer que a la hora de clasificar a los virus podemos realizar dos grandes grupos. Por un lado, tendríamos los llamados virus ADN que se identifican por el hecho de que toman como escenario de su desarrollo lo que es el núcleo de la célula en cuestión. Dentro de esta categoría existen a su vez dos clases: el monocatenario, en el que toma protagonismo un ADN de cadena sencilla, y el bicatenario, que en su caso tiene ADN de cadena doble.
Por otro lado, nos encontramos con los virus ARN, que se dan en llamar así por el motivo de que utilizan el ARN (el ácido ribonucleico) como material genético y porque además toman al citoplasma como lugar para proceder a la replicación. Dentro de esta modalidad existen cuatro grupos: el monocatenario positivo, el monocatenario retro transcrito, el bicatenario y el monocatenario negativo.
El ciclo vital del virus, un agente potencialmente patógeno, requiere de la maquinaria metabólica de la célula invadida, para de esta forma poder replicar su material genético y producir muchas copias del virus original. Este proceso puede perjudicar a la célula hasta destruirla.”
Este funcionamiento ha sido imitado por los denominados virus informáticos, que son programas que se copian en forma automática y que su objetivo es afectar el normal funcionamiento de una computadora, sin el consentimiento del usuario.
En el sentido estricto del término, los virus informáticos son programas que pueden replicarse y ejecutarse por sí mismo. En su accionar, suelen reemplazar archivos ejecutables del sistema por otros infectados con el código maligno. Los virus pueden simplemente molestar al usuario, bloquear las redes al generar tráfico inútil o, directamente, destruir los datos almacenados en el disco duro del ordenador.
A la hora de hablar de virus informáticos tenemos que nombrar a los más famosos o más frecuentes entre los que se encontrarían, por ejemplo, los troyanos. Estos son los que se pueden definir como aquellos que roban información, permiten que un usuario externo pueda controlar el ordenador o simplemente alteran el citado dispositivo.