La opinión y la información como Derechos
Guillermo García Machado
Los que de una u otra forma colaboramos con los medios
de comunicación debemos entender, defender y proponer formal e informalmente,
que de conformidad con el artículo 19 de la Declaración de Derechos Humanos:
“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión”. En el mundo
entero, hay personas que son acosadas y encarceladas por ejercer su
derecho a la libertad de expresión, pero todo el mundo tiene derecho
a buscar, recibir y difundir información e ideas sin temor o injerencias.
Este derecho es importante para el desarrollo personal y la dignidad de
cada persona, y es fundamental para el disfrute de otros derechos humanos.
La libertad de expresión ha sido siempre parte esencial del trabajo de
Amnistía Internacional, y guarda una estrecha relación con el derecho
a defender la propia opinión y con el derecho a la libertad de
pensamiento, conciencia y religión. Amnistía Internacional ha hecho y hace
campaña en favor de miles de presos y presas de conciencia: personas encarceladas
a causa de sus convicciones políticas, religiosas o de otro tipo o
a causa de su origen étnico, sexo, color, idioma, origen nacional
o social, situación económica, nacimiento, orientación sexual o cualquier
otra condición. Pedimos la libertad inmediata e incondicional de todos los
presos y presas de conciencia.
Los Gobiernos
han utilizado históricamente la “seguridad nacional” como excusa para acallar
la oposición
política y las
críticas. En los últimos años se han invocado tanto el temor
al "terrorismo" como la seguridad para justificar un aumento de
la represión de las personas y los grupos que ejercen su derecho a
la libertad de expresión. La introducción de legislación antiterrorista
más restrictiva en la mayoría de los países del mundo está teniendo serias
repercusiones en la libertad de expresión y en otros derechos. Estas
medidas son cortas de miras. El debate abierto y el respeto por los
derechos humanos son el único marco en el que la seguridad y el desarrollo
pueden sostenerse.
Las nuevas
tecnologías, es decir, el propio Internet ha abierto nuevas vías para
que personas y grupos busquen y difundan información e ideas. Sin embargo,
también es una nueva frontera en la que la libertad de expresión está
encarando nuevos desafíos. Por ejemplo, en China se han introducido nuevos
reglamentos para aumentar los controles oficiales sobre Internet. Países como
Cuba, Venezuela y Bolivia, para nombrar algunos, también hacen de las suyas
imponiendo serias limitaciones La regulación y la censura se han extendido
a autores de blogs y propietarios de sitios web, llegándose a cerrar
numerosos sitios web por proporcionar información que las autoridades
consideraron
“delicada”. Los
cibernautas que suben esos datos a la red corren el riesgo de ser
detenidos, procesados y
encarcelados.
Numerosas páginas web, como la de Amnistía Internacional, están
censuradas. Los controles sobre la información se han extendido incluso
a los SMS en Pekín o Beijing.
No comments:
Post a Comment