Tarugo
Guillermo García Machado
Hay que ver las explicaciones
necesarias para llegar a la acepción que
más le cuadra al presidente Maduro. El término tarugo tiene diferentes usos. En algunos países el concepto hace referencia
al elemento que permite brindarle mayor seguridad a un tornillo en una pared o en otra estructura. En
este caso, tarugo es sinónimo de taquete, espiche o taco.
Supongamos
que una persona decide colgar un cuadro para decorar
su salón. La primera herramienta que deberá utilizar es un taladro, gracias al
cual podrá agujerear la pared; uno de los puntos fundamentales de este paso es
asegurarse de usar una broca (también conocida como mecha)
con un diámetro equivalente al del tarugo, y también debe tomar en cuenta su
longitud para evitar que este último sobresalga o quede demasiado incrustado.
Una vez hecho el hueco, debe colocar el tarugo dentro de él y, finalmente,
introducir el tornillo, sobre cuya cabeza podrá colgar el cuadro y así
completar la tarea.
Un truco que se suele usar para evitar que el agujero realizado con el taladro difiera en
profundidad con la longitud del tarugo es realizar una pequeña marca sobre la
broca con un rotulador (también conocido en América Latina
con el nombre de marcador). Cabe mencionar que no
siempre es necesaria la exactitud, sino que esto depende del tipo de trabajo a
realizar, y del peso del objeto que deseemos fijar, entre otros factores.
Uno de los tipos más comunes de tarugos se
denomina de
expansión. Su nombre deriva del hecho de que su diámetro
aumenta a lo largo del proceso de inserción en un muro, ya que al colocar
dentro de él un tornillo se separan sus dos mitades, las cuales
suelen tener una superficie exterior dentada que colabora con la fijación en
una pared de cemento,
yeso o ladrillo, entre otros materiales de construcción. En el
ejemplo del cuadro, un tarugo de expansión es el más idóneo.
Por otro lado, existe el tarugo químico,
cuya utilización es diferente. En primer lugar, exige la limpieza del agujero
para quitar cualquier partícula de material que haya quedado luego de
la acción del taladro, para lo cual es ideal el uso de un soplador neumático.
Luego, se inserta un tamiz,
dentro del cual se coloca una masilla especial que consta de dos componentes
capaces de endurecerse en unos pocos minutos, período en el cual debe
asegurarse una varilla
roscada en la
posición deseada. La noción de tarugo también
se emplea para nombrar a un pedazo
de pan o a un fragmento de madera que se caracterizan por su grosor y su
escasa longitud. Por
ejemplo: “Voy a poner un tarugo debajo de la pata de la
mesa así no se mueve cuando comemos”, “Por
favor, fija la puerta con un tarugo para que el viento no la golpee”, “Tengo
hambre y sólo quedan unos tarugos de pan: creo que tendré que ir a hacer compras
para conseguir algo de comida”. En algunas naciones, por último, se
califica como tarugos a los individuos que evidencian poca
capacidad de raciocinio o entendimiento y a las personas pequeñas y robustas.
No comments:
Post a Comment